INGENIERÍA DE LA SERVIDUMBRE: LA FARSA ELECTORAL Y
LA CADENA DEL VOTO OBLIGATORIO:
AUMENTAN LAS MULTAS EN CHILE PARA LOS QUE NO VOTAN
EN LAS ELECCIONES BURGUESAS.
Hoy los
analistas políticos de los partidos políticos vomitan los estudios y encuestas de la
última "ingeniería electoral" digital y algorítmica, una nueva patraña
pseudocientífica que el capital y sus lacayos parlamentarios emplean para justificar su existencia y perpetuar la democracia, donde el pueblo, encadenado por el sufragio, termina legitimando su propia opresión.
La reimposición
del voto obligatorio en Chile en 2022 es un eslabón más en esta cadena, una burda
maniobra para arrastrar a las masas hacia las urnas, forzándolas a participar
en un circo que solo sirve a los intereses de la clase dominante.
El parlamento, ese nido de arribistas y gestores del capital, ha sancionado una nueva ley que aumenta el castigo con multas exorbitantes o prisión la negativa a validar su farsa electoral.
Con multas que pueden llegar a los 210.000 pesos chilenos (unos 220 dólares estadounidenses), estas sanciones son un claro ejemplo de la violencia económica ejercida por el Estado contra el proletariado, porque en caso de no pagar, siempre queda a los jueces la condena en prisión, confirmando que esta es una sanción que al final solo pagan los pobres.
Curiosamente,
esta obligación se ciñe solo a los ciudadanos chilenos, dejando fuera a los
migrantes, quienes también están obligados a votar pero sin una sanción ante el incumplimiento. Esto
obedece a un intríngulis político diseñado por la ultraderecha para congraciarse con los 1.200.000 votantes
venezolanos inmigrantes que, por venir de una dictadura de izquierda, se estima votaran en masa por una ultraderecha deseosa de contar con sus votos.
La historia reciente ha demostrado la futilidad de sus cálculos. La reintroducción del voto obligatorio, lejos de asegurar la victoria de una u otra facción de la burguesía, ha expuesto la imprevisibilidad de una masa obligada. En el plebiscito constitucional de 2022, las proyecciones de la izquierda se desmoronaron ante un "Rechazo" masivo, evidenciando que ni siquiera el garrote de la ley puede controlar completamente la voluntad popular.
La llamada
"ingeniería" de Factoría Pública, con sus proyecciones para las
elecciones de 2025, solo reconfirma lo que siempre hemos sabido: el
parlamentarismo es un juego de espejos donde la dispersión de una facción
beneficia a la otra. Este análisis pseudoingenieril, superficial, basado en votos de una pasada elección de concejales municipales y
candidatos "independientes", ignora la verdadera dinámica de poder y
la creciente desafección hacia un sistema electoral, corrupto e irrelevante para
la mayoría de la clase trabajadora. La existencia de nuevos partidos, como el "Partido Nacional Libertario", de corte fascista, no hacen más que aumentar la
podredumbre.
Desde una
perspectiva anarcosindicalista, afirmamos que la verdadera transformación no
reside en las urnas ni en los despachos parlamentarios. El camino hacia la
libertad y la justicia social pasa por la acción directa, la autoorganización del
proletariado y la construcción de autogestión desde abajo, al margen del Estado
y del Capital.
El voto
obligatorio no es un derecho, sino una imposición que busca canalizar la rabia
y el descontento popular hacia mecanismos ineficaces solo para que nada cambie.
Nuestra lucha
es por la abolición de toda forma de dominación, por una sociedad sin clases ni
Estado, donde la solidaridad y el apoyo mutuo reemplacen la farsa de la
"ingeniería electoral" y la tiranía del voto.
¡NO VOTAR! ¡ANULAR!
¡LA LIBERTAD Y EL BIENESTAR ESTÁN AL ALCANCE DE NUESTRAS MANOS!
¡VIVA EL
COMUNISMO ANÁRQUICO!
SOCIEDAD DE RESISTENCIA DE OFICIOS VARIOS VALPARAÍSO
srovv.valparaiso@gmail.com